Embalsamemos a Maduro
Los discursos de Maduro no causan risa, sino estupor, vergüenza ajena, angustia existencial. Por Daniel Samper Ospina / Semana * La noticia de que ya no iban a embalsamar a Chávez me dio tan duro como su propia muerte: ¿cómo es posible que ya no lo disequen, me golpeaba contra las paredes, si esa habría…