Venezuela: La protesta continúa…

En pocas palabras. Javier J. Jaspe, Washington D.C.

La protesta de los venezolanos en contra del gobierno ilegítimo de Nicolás Maduro ya superó con creces un mes desde su inicio a comienzos del mes de febrero. Por los vientos que soplan, la misma parece que se mantendrá por un tiempo indefinido hasta que se obtengan los objetivos planteados, principalmente, el logro de un gobierno de transición de unidad nacional para liberar a Venezuela del dominio que ejercen los Castro desde Cuba, restablecer la libertad y la democracia, convocar a elecciones para elegir un nuevo presidente, renovar los poderes públicos y adoptar cuanto antes un programa que permita enfrentar la grave crisis económica que vive el país.

Al-menos-21-personas,-entre-opositores-y-oficialistas,-han-perdido-la-vida-en-un-sangriento-mes-en-Venezuela.Ha sido una lucha intensa, dura y muy dolorosa para muchas familias venezolanas, como lo demuestra la cantidad de víctimas, treinta hasta el momento (http://www.noticierodigital.com/2014/03/conozca-la-lista-de-fallecidos-desde-el-12-de-febrero/), más de 1500 detenidos, cientos de personas heridas y/o sometidas a torturas y humillaciones, sin contar el inmenso daño ocasionado a propriedades públicas y privadas, como producto de la política de brutal represión puesta en práctica por el gobierno madurista, mediante el uso de fuerzas militares, policiales y paramilitares. Estamos, y no hay que decirlo en tono menor, ante la más numerosa, diversificada, extendida, prolongada, reprimida e importante protesta popular realizada en Venezuela en contra de un gobierno ilegítimo, en lo que va de la historia republicana del país. En los párrafos siguientes proponemos hacer un breve comentario sobre algunos de los factores principales que harían vaticinar que la aludida protesta logrará sus objetivos.

Los objetivos son claros – En el párrafo que inicia este artículo hemos recogido los principales objetivos de manera resumida. Los mismos corresponden al convencimiento de que el gobierno madurista está llevando el país a su más completa ruina política, económica y social, y se muestra incapaz de generar soluciones a los graves problemas que lo acogotan. Existe plena conciencia nacional de que este gobierno no es sólo ilegítimo por su origen, sino que además lo es por su pésimo desempeño en el ejercicio del poder (http://www.noticierodigital.com/2014/03/nicolas-maduro-ilegitimo-de-origen-y-de-ejercicio/). Su sustitución no sólo se encuentra justificada por razones de ilegitimidad, sino que es, al mismo tiempo, una cuestión de supervivencia nacional. Las acciones totalitarias de Maduro, como el llamado Plan de la Patria y el decreto ley de precios justos, en el propósito de implantar el castrocomunismo, han pretendido profundizar la división, por lo que se hace necesario lograr la instalación de un gobierno de unidad nacional que reconcilie a los venezolanos en el restablecimiento de la libertad y la democracia. Los poderes publicos, como el tribunal supremo de justicia, el consejo nacional electoral, la defensoría del pueblo o la fiscalía general, entre otros, se encuentran en manos de seguidores del madurismo y sólo han servido como cómplices para instrumentar las políticas represivas del régimen. Su renovación es tarea de inaplazable urgencia, para restaurar el equilibrio y balance que representa la separación de poderes en todo sistema democratico de gobierno. De manera, pues, que los objetivos están claros y sería incorrecto sostener que las protestas se proponen objetivos difusos que perjudican a la oposición y la desprestigian ante el país o la comunidad internacional.

La dependencia de cuba se ha acentuado – Ponerle punto final al dominio que ejercen los Castro sobre el gobierno venezolano, constituye el epicentro de los objetivos de la protesta de los venezolanos en contra del régimen madurista. Maduro ha acentuado la dependencia de su gobierno de los Castro en Cuba, ya que no sólo les ha mantenido el subsidio petrolero, pese a la disminución de los ingresos en divisas, sino que ha incrementado los llamados acuerdos de cooperación mediante los cuales todo el peso economico recae sobre Venezuela, mientras el régimen comunista cubano sólo suministra unos servicios de dudosa calidad, innecesarios y totalmente sobrecuantificados. Para colmo, Maduro ha anunciado recientemente la puesta en vigencia de una tarjeta de racionamiento calcada del modelo castrocomunista cubano, con el cual pretende someter a los venezolanos a un sistema humillante de colas permanentes para obtener productos de primera necesidad. La contrapartida de esta tarjeta es la centralización totalitaria de las importaciones por parte del régimen madurista, a través de prácticas corruptas (www.tvn-2.com/noticias/noticiasam/default.asp?video=8439#video), las cuales traen consigo la baja calidad de los bienes importados, cuando no su marcado deterioro en las aduanas del país. Por tanto, la protesta popular en contra de la indicada dependencia de los Castro constituye una tarea de alto interés nacional que prácticamente le da visos de gesta libertaria a dicha protesta, como si se tratara de lograr una segunda independencia venezolana, esta vez del yugo castrocomunista cubano.

La protesta tiene respaldo en la Constitución –  La constitución venezolana incluye disposiciones que le dan fortaleza institucional a la protesta en curso. Baste citar dos de estas disposiciones. En primer término, la contenida en el artículo 333 que a la letra dice:

[box_dark]Constitucion art 350[/box_dark]“Esta Constitución no perderá su vigencia si dejare de observarse por acto de fuerza o porque fuere derogada por cualquier otro medio distinto al previsto en ella. En tal eventualidad, todo ciudadano investido o ciudadana investida o no de autoridad, tendrá el deber de colaborar en el restablecimiento de su efectiva vigencia.”

Por su parte, el artículo 350 establece:

El pueblo de Venezuela, fiel a su tradición republicana, a su lucha por la independencia, la paz y la libertad, desconocerá cualquier régimen, legislación o autoridad que contraríe los valores, principios y garantías democráticos o menoscabe los derechos humanos.”

Mútiples son los ejemplos en los cuales el gobierno madurista ha violado la constitución, derogándola en su efectiva vigencia, o contrariado los valores, principios y garantías democráticos, menoscabando los derechos humanos. El uso de la fuerza armada con fines politicos, la ilegitimidad de origen y de ejercicio de Maduro, y la misma represión brutal, mediante la cual se usaron contingentes militares, policiales y paramilitares, para asesinar, violar, humillar y torturar a los venezolanos participantes en la protesta, hechos que se encuentran claramente documentados (http://www.noticierodigital.com/2014/03/el-foro-penal-sube-a-48-las-denuncias-de-torturas/), constituyen contudente evidencia de tales violaciones de la constitución. Por tanto, la protesta se encuentra legitimada y respaldada por expresas disposiciones del más alto rango normativo que autorizan a los venezolanos a restablecer la efectiva vigencia de la constitución y a desconocer el régimen madurista.

Los problemas de escasez, inflación, falta de dólares, inseguridad y desempleo se han agravado – La gente percibe claramente que el gobierno no tiene a la mano ni es capaz de generar soluciones a estos problemas. Antes, por el contrario, se da cuenta que fue victima de una grosera manipulación por parte de Maduro, cuando en meses pasados propició el saqueo de algunas tiendas y prometió una reposición inmediata de los inventarios a precios rebajados. El pueblo se confronta con el día a día de las interminable colas para poder obtener productos básicos de la dieta familiar o medicinas necesarias para atender sus enfermedades. Los precios de los bienes suben estimulados por una inflación que se anualiza en cifras alrededor del 60% y amenaza con disparar la hiperinflación. El dólar sigue elevándose en el mercado paralelo y las empresas no obtienen a tiempo la asignación de las divisas, debido a un sistema en permanente cambio y reacomodo para escudar devaluaciones sucesivas del bolivar. Los jóvenes encuentran cada vez más difícil la consecución de empleos. La inseguridad sigue diezmando en las calles la vida de los ciudadanos y para usted de contar…

La protesta venezolana es de naturaleza esencialmente pacífica – Este es un elemento que debe destacarse a los cuatro vientos. La protesta venezolana es en esencia pacífica. El discurso de Leopoldo López, en el momento en que fue llevado a prisión, así como los sucesivos comunicados del movimiento estudiantil y de otros dirigentes politicos de la oposición, como Alfredo Ledezma, han sido suficientemente claros a este respecto. Si han habido algunos rasgos  de violencia, a través de barricadas o “guarimbas” como las califica el gobierno, las mismas no han sido organizadas ni mucho menos comandadas por quienes tienen a su cargo las riendas y el liderazgo de la protesta. Estas aisladas manifestaciones han surgido principalmente como respuesta a la brutal represión ejercida por el gobierno madurista y sus fuerzas militares, policiales y paramilitares. En otras palabras, al gobierno le interesa provocar para que se produzcan reacciones violentas que justifiquen su brutal represión, como una especie de juego de ping pong represivo. Por tanto, las referidas barricadas o guarimbas vienen a representar mecanismos de legítima defensa de quienes acosados por el uso de armas mortíferas, lluvia de gases lacrimógenos y masivas descargas de perdigones de escopeta, se ven en el estado de necesidad de responder con elementos rudimentarios o caseros para ponerse a resguardo y evitar ser víctimas de la violencia oficial.

botasLos jóvenes han asumido el liderazgo y las riendas de la protesta – Digamos de inicio, que los jóvenes, especialmente los estudiantes universitarios, han aprovechado la experiencia de jornadas de protestas anteriores en contra de los gobiernos del finado Hugo Chávez o del mismo Maduro, cuando debieron ponerle fin a tales protestas por exigencia de factores externos y a pesar de que sus objetivos no se habían cumplido. En nuestra opinión, durante la presente protesta, los jóvenes se convierten en sus líderes naturales pues ellos son los principales afectados con el estado caótico en que se encuentra el país en que les tocará actuar en el futuro inmediato, obtener empleo, casarse, constituir una familia, adquirir viviendas, disponer de servicios públicos, participar en quehaceres cívicos o políticos, y en general desempeñarse en las diversas actividades en la que esperan desarrollarse y realizarse como hombres y mujeres útiles a la sociedad venezolana. No debe olvidarse que los jóvenes en la edad entre 15 y 34 años representan más de la tercera parte de la población del pais, ya que el censo de 2011 los ubicó en cerca de diez millones. Por tanto, es justificable el empeño político de la presente generación de jóvenes de mantener la protesta hasta que sus objetivos se hayan finalmente cumplido.

calles de Venezuela protestas contra regimenLa protesta ha generado sus propios elementos de mantenimiento y expansion – Digamos de entrada que uno de los principales efectos de la presente protesta es que la gente le ha perdido el miedo a manifestar. El país se sacudió la modorra de la indiferencia y del conformismo, diciendo al unisono en criollo: “ya no me calo más este gobierno ilegítimo, inepto y castrocomunista”. La protesta se realiza no sólo en Caracas, sino que regiones del interior como las de Táchira, Mérida o Zulia se convierten en ejemplo a seguir por los jóvenes de la capital. Las manifestaciones discurren como una actividad de la familia en la que participan todos sus miembros de manera solidaria. Esto, por ejemplo, se pudo ver recientemente en la plaza Altamira, uno de los bastiones simbólicos de la protesta en Caracas, luego que fuese tomada en una especie de golpe militar de sombra por más de mil docientos efectivos armados hasta los dientes, cual robocops tropicales. Después de la toma militar, el grupo de madres de blanco se hizo presente en la plaza a conversar con los soldados, a explicarle la justa protesta que mantienen sus hijos y nietos, a lo cual siguió una retoma pacífica de la plaza por una masiva cantidad de los habitantes del sector, ante la mirada asombrada de los soldados, quizás preguntándose qué hacer ante esta actitud sobrevenida, espontánea e inesperada del pueblo. Al gobierno le salió el tiro por la culata de sus Kalashnikovs.

El nombramiento de una supuesta “comisión de la verdad” con representantes de los partidarios del gobierno por parte de la Asamblea Nacional y una minoría de diputados que se dicen de oposición, no ha dejado de ser interpretado como un intento de escamotear los hechos reales relacionados con la protesta. Por lo pronto, ya se anuncia que los partidarios del gobierno madurista han solicitado el allanamiento a la inmunidad de la diputada María Corina Machado (http://www.noticierodigital.com/2014/03/solicitan-antejuicio-de-merito-contra-maria-corina-machado/), una de las principales dirigentes en la protesta, a quien Panamá le ha cedido su asiento para que pueda exponer la posición de quienes protestan en Venezuela en una próxima reunión de la OEA. Sinembargo, mientras mayor es la represión y la actuación de las fuerzas represivas del régimen madurista, como es el caso de los grupos paramilitares, así como su empeño en arremeter en contra de quienes participan o dirigen la protesta, más acerado se torna el espíritu de resistencia y el ánimo de la gente para continuar llevando a cabo la misma hasta lograr sus objetivos.

El apoyo al gobierno madurista se debilita – Mientras los factores que alimentan el carácter justo de la protesta emprendida por los venezolanos en contra del régimen madurista se fortalecen, los elementos que le sirven a éste de apoyo tienden a debilitarse. Maduro tiene centradas las esperanzas en que la comisión de cancilleres designada por el club de amigos conocido como Unasur, beneficiarios de negocios y el subsidio petrolero venezolano, entre otros, a Cuba, países del ALBA o miembros de PETROCARIBE, lo ayude en su tarea de mantenerse a toda costa en el poder. Sinembargo, es bastante improbable que esta comisión, con falta absoluta de credibilidad, nacional e internacional, pueda llegar a representar un valor añadido en favor de un cese de la protesta. Maduro ha propuesto realizar un diálogo con quienes protestan, el cual no pasa de ser un sainete para engañar incautos. Los dirigentes de la protesta han exigido para sentarse a conversar, que se liberen los presos politicos, se desarmen las fuerzas paramilitares y se establezcan las responsibilidades de quienes han asesinado a mansalva los participantes en la protesta, entre otras condiciones para que se produzca un diálogo serio y constructivo.

Por su parte, el cuento de la intervención de los Estados Unidos para derrocar a Maduro, ya nadie se lo traga y sólo produce pena ajena incluso entre sus seguidores. Las últimas encuestas revelan que 64% de los venezolanos propician la salida de Nicolás Maduro, por via constitucional (http://www.lapatilla.com/site/2014/03/16/datos-64-de-acuerdo-con-salir-de-este-gobierno-lo-antes-posible-de-forma-constitucional-encuesta/). Finalmente, los factores de una mayor división en las Fuerzas Armadas Nacionales se hacen cada vez más evidentes. Pero ésta es otra historia…

En pocas palabras, la protesta de los venezolanos en contra del régime ilegítimo de Nicolás Maduro parece estar llamada a continuar hasta que se cumplan los objetivos planteados, principalmente, el logro de un gobierno de transición de unidad nacional para liberar a Venezuela del dominio que ejercen los Castro desde Cuba, restablecer la libertad y la democracia, convocar a elecciones para elegir un nuevo presidente, renovar los poderes públicos y adoptar cuanto antes un programa que permita enfrentar la grave crisis económica que vive el país. En los párrafos que anteceden nos hemos referido a varios de los factores principales que obrarían en favor de la obtención de los indicados objetivos y a ellos remitimos. Veremos…. 

 

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