EL DESPERTAR.
Me siento optimista y tengo razones para hacerlo. Se respira en el ambiente un inmenso olor de libertad despuès de este largo letargo que hemos vivido y confrontado los Venezolanos en màs de una dècada donde las masas confundidas por una propaganda agresiva y atractiva se apoderò de la mente de un gran sector de la poblaciòn Venezolana.Seremos poder muy pronto. Ojalà Dios y el talento nos ilumine para no incurrir nunca màs en la fatalidad de un denominado Socialismo del Siglo XXI.
Mucha agua ha corrido debajo de los puentes no para bien de los Venezolanos sino para -mal- de todos.El actual poder venezolana legitimado y no legitimado es un poder que ha sucumbido ya a las peores tentaciones del poder, se goza del poder, pero con su ejercicio a la causa del pueblo, no se sirve al bien comùn social. El miedo se extiende y paraliza. Se nutre de la incomprensiòn de lo que pasa y de la objetiva consideraciòn del poder de los poderosos y del engaño a los necesitados. Las irracionalidades generan aprehensiones, pero tambièn inmovilismos. La unica fuente de vigor interior es la limpieza de la propia conciencia. Socialmente las tiranìas provocan, en el orden moral personal y en el campo social, la hipocrecìa perpetua.Porque cada segmento que se pliega a la simulaciòn como estilo de vida, pensando, con sus facultades de camaleòn a la espera, que podrà evadir, en lo que a su interès personal o grupal atañe.
La corrosiòn de la licìtud de lo pùblico y de la necesidad de la polìtica y de las instituciones democràticas vinculadas a ella ha preparado la tormenta – que esta a las puertas-pero un liderazgo equilibrado y renovado rescatarà las instituciones y retornaremos a una Segunda Etapa de la Democracia del Siglo XXI. La tragedia no nos envolverà a todos… quizàs estemos a tiempo… y le metemos el hombro a la tarea lo vamos a lograr.
Inconcebible como un gobierno totalitario de signo caudillesmo y personalista ha destruìdo el aparato productivo de la economìa, como la inflaciòn acumulada alcanza el 12 % en un gobierno acumulado del pasado y del presente donde Nicolàs Maduro. Las expropiaciones y confiscaciones han sido desvastadoras para la inversiòn y el crecimiento econòmico el modelo rentista de la dependencia petrolera es casi absoluta y el resto son impuesto como el IVA y el Impuesto tributario. La historia nos enseña que tales expropiaciones suelen ir acompañadas de la proscripciòn de aquellos a quienes se le expropia. La proscripciòn viene, a la postre, a ser aniquilación del pluralismo social y polìtico, intrìnseco al sistema de libertades cívicas para el cual se hizo, se rehizo y debe siempre rehacerse la Repùblica.
El fanatismo de este gobierno prolongado totalitario ha creado lamentablemente una ruptura en la unidad afectiva de los venezolanos. El recurso de lo magico està en la bases de estos nuevos fanatismos. El inmediatismo provoca alucinaciones en el imaginario colectivo. La aversiòn de esta Revoluciòn del Siglo XXI – que no es Revoluciòn ní es del siglo XXI-. El odio al pasado democràtico de los cuarenta años de la Repùblica Civil, les impide el juicio sereno sobre èl, verlo con serenidad, en el contexto de nuestro atormentado proceso de pueblo, sino, también, la sensata acometida para la construcciòn del futuro.
* en Ex-Secretario del Parlamento Venezolano, profesor de historia, analista político
