VOA / Análisis Libre
Estados Unidos presionará a Cuba por su intromisión en Venezuela y “esto es solo el comienzo, y no el final de nuestra campaña de presión”, dijo el miércoles un alto representante de la administración Trump, que habló con medios sobre las estrategias de Washington en la región.
“Al igual que Irán no puede salirse con la suya en Siria, no podemos permitir que Cuba se salga con la suya en Venezuela”, afirmó el funcionario que pidió no ser identificado.
“Cuba apoya a Venezuela no solo económica sino políticamente y mediante un aparato de inteligencia que ayuda al gobierno de Nicolás Maduro a mantenerse en el poder”, dijo el representante del gobierno estadounidense.
Agregó que uno de los objetivos geopolíticos de la Casa Blanca es la presión tanto a Cuba como a Venezuela, indicando que todas las opciones están sobre la mesa y que las sanciones son una de las herramientas a disposición de Washington.
«Continuaremos maximizando la presión al menos de que el gobierno (venezolano) muestre señales tangibles para restituir la institución democrática en el país», expuso el funcionario.
Entre los focos de la política exterior estadounidense, también estaría reafirmar el compromiso de la región con la democracia, teniendo como centro la Carta Democrática Interamericana, aprobada en septiembre de 2001 por los países miembros de la Organización de Estados Americanos.
«Debemos renovar sus votos, hacer cumplir y asegurarnos que la región pueda mantenerse unida contra autócratas”, indicó el representante de la administración Trump, remarcando los casos de Cuba, Nicaragua y Venezuela.
En relación a Nicaragua indicó que “es imperativo que haya elecciones para que el país pueda recuperar la legitimidad política y avanzar hacia la estabilidad económica”.
Otra de las estrategias delineadas tiene que ver con la forma en la que EE.UU. quiere contrarrestar la influencia económica y política china en la región.
El mayor receptor de préstamos chinos en la región es Venezuela.
“Venezuela tendrá que encontrar una manera de pagar todos estos préstamos irresponsables de China”, aseveró el alto funcionario estadounidense, quien añadió que “todo el concepto de UNASUR ALBA está en retirada, y que hay una oportunidad donde los gobiernos como el de Ecuador estarían tratando de avanzar en la dirección correcta”.
En cuanto a Brasil, Estados Unidos tiene confianza en las instituciones democráticas del país, dijo el funcionario, señalando que «no estamos preocupados por Brasil».
Crecimiento económico
Otra de las prioridades de la administración Trump, es el crecimiento económico, explicó el representante estadounidense, que destacó los acuerdos marco que ha firmado Estados Unidos con Panamá y Chile “para ver cómo pueden superarse los obstáculos en la inversión en energía e infraestructura en esos países”.
Además de avanzar en el crecimiento económico de EE.UU. y el continente. «Tenemos la economía más dinámica del mundo, la extensión natural es el crecimiento de la región»
Estados Unidos también busca la seguridad nacional en los países del hemisferio occidental, en términos de migración, crimen transnacional y tráfico de drogas como parte de sus prioridades de política exterior para la región.