Según el gobierno venezolano, las empresas promueven colas para dar «sensación de desabastecimiento».
Según el gobierno venezolano, la empresa privada es responsable de la supuesta “guerra económica” que tiene sometidos a los ciudadanos al desabastecimiento y escasez.
Aymara Lorenzo Ferrigni – Caracas, Venezuela
VOA / analisislibre.org
El gobierno del presidente Nicolás Maduro insiste en acosar a la empresa privada, a la que responsabiliza de una supuesta “guerra económica” contra su gestión.
Maduro amenazó este fin de semana a toda empresa privada que acapare alimentos y productos de primera necesidad y no los venda de forma oportuna a la población.
«A quien agarremos con la mano en la masa, ya sabe le espera una cárcel, le espera un proceso judicial, enfrentarse a la ley. Así de sencillo”, dijo Maduro.
Por el contrario, el gremio empresarial asegura que lejos de incentivar la producción, el gobierno la obstaculiza.
El segundo vicepresidente de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras), Carlos Larrazábal, dijo que el gobierno ha generado es «una paralización total en un país que depende de los dólares» al reducir al mínimo el acceso a divisas para importar materia prima y bienes acabados.
El sector empresarial sostiene que el gobierno de Maduro despliega una campaña para “intentar demostrar una supuesta guerra económica, buscando las causas del desabastecimiento”, argumentó Larrazábal.
“El gobierno ni siquiera define cuánto es un inventario que signifique acaparamiento”, reclamó.
Este fin de semana fueron retenidos 10 camiones de la empresa Polar, la fábrica privada más grande de alimentos de Venezuela.
De los 10, seis camiones fueron desviados de forma ilegal, según denunció la empresa, y la mercancía llevada a un centro de acopio de la denominada Distribuidora Socialista de Barinas.
Pero no solo en el sector de alimentos la empresa privada es objeto de acciones del gobierno.
También se incluyó al sector salud en el “combate” contra la supuesta “guerra económica”.
El presidente de la Asociación de Clínicas y Hospitales Privados, Carlos Rosales, fue detenido en su consultorio por el Servicio Bolivariano de Inteligencia (SEBIN) el viernes en la tarde.
Durante tres horas rindió declaraciones por haber denunciado públicamente la semana pasada que las clínicas tienen dificultad para funcionar por la escasez de insumos y medicamentos.
“Hay entre un 60% y un 70% de escasez de medicamentos y la mitad de los equipos están paralizados por falta de repuestos”, dijo Rosales a Globovisión.
Víctor Maldonado, director ejecutivo de la Cámara de Comercio de Caracas, calificó como “un cerco, pero de características terminales y autoritarias”la situación que enfrentan las empresas privadas y que afecta directamente a los ciudadanos.
“Esto pone un punto de inflexión entre las expectativas de cambio alrededor del gobierno y sus políticas económicas, y la realidad que está demostrando, porque todo el mundo espera algún tipo de remisión de las políticas hacia el sector privado, pero lo que estamos viendo es que no va a cambiar su estilo de políticas vinculadas a la violación de la propiedad privada”, dijo Maldonado a la Voz de América.
Maduro no parece estar “dispuesto a ninguna solución factible que nos saque a nosotros de las colas, de la escasez y la inflación, que no se van a acabar por la vía de poner presos a los empresarios”, señaló Maldonado.
¿La solución?, atacar “las verdaderas causas que son el desorden fiscal y un manejo inapropiado de las reservas internacionales”, concluyó.
Un estudio de opinión de la encuestadora Keller, realizado en diciembre, arrojó que el 75% de la población está de acuerdo en defender a la empresa privada porque “genera empleo, productos de calidad y progreso”.