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Juan José Monsant Aristimuño
Análisis Libre Internacional
Invasiones fueron las ejecutadas por Adolfo Hitler en Polonia, Austria, Holanda, Bruselas, Francia, Rusia y hasta en el Magreb africano; y la de Mussolini en Etiopia, vaya usted a saber por qué razón. La de los japoneses en China, y la de los chinos en el Tibet. Las de la Unión Soviética en Checoeslovaquia, Hungría, Ucrania, Letonia, Estonia, Lituania, Polonia, Alemania. La de los turcos otomanos en Europa, Grecia y Chipre; antes, la de los árabes en España, Francia y Bélgica. Y mucho antes, la de los babilonios, asirios, griegos, romanos y árabes musulmanes en Israel. ¿Y qué decir de los mogoles y los llamados bárbaros de Atila sobre el Sacro Imperio romano germánico, que llegaron a las misma puertas de Roma. No podemos pasar por alto las invasiones de los blancos y árabes en el continente africano.
Lo común de todas ellas ha sido la ocupación física de territorio invadido, el espacio vital, la necesidad de expandirse por razones económicas, geográficas, de seguridad, venganza y hasta por vanidad. Los aztecas invadían y ocupaban para esclavizar a sus vecinos y ponerlos a su servicio y sacrificios; para que vayamos dejando de glorificar e idealizar la pureza espiritual del aborigen del denominado Nuevo Mundo; en tanto que nuestros caribes se engolosinaban con el cuerpo de sus enemigos al son del “Ana Karina Rote” (Solo los caribes son gente).
He allí, entonces, el alcance de lo que es una invasión. Hasta la ocupación o invasión de tierras agrícolas o baldías conlleva el componente de la ilegalidad e ilegitimidad de origen, por lo que en algún momento los terrenos ocupados deben retornar a sus dueños, sea el Estado sea un particular, a menos que medie una sentencia de expropiación por causa de utilidad pública, pero eso es otra cosa.
Guerra de liberación es otra cosa, tiene otra dimensión y otros componentes de legalidad, legitimidad, y hasta del Derecho Natural del hombre a defender su vida y la de los suyos, su dignidad y su propiedad.
Venezuela es un caso inédito en la historia de la humanidad, a lo menos en la historia moderna de la humanidad, desde el surgimiento del Estado-Nación (Tratado de Westfalia, 1648). Es el único país de los cinco continentes existentes que no tiene signo monetario alguno, el único gobierno del mundo que haya existido o que existe, sea dictadura, monarquía o república, que decidió formalmente disolverse como nación asentada en un territorio. Es el único gobierno del mundo, dictadura o democracia, que decidió formalmente entregar su patrimonio material y cultural, su historia y su futuro a otro país sin el oprobio de ser invadido: Cuba, o lo que los hermanos Castro representan y representaron; es el único gobierno del mundo que decidió desde su inicio hermanarse, arrullarse, proteger, incentivar y financiar a todos los movimientos terroristas existentes en los cinco continentes, cuya finalidad es destruir los principios, legalidad y las bases del sistema político democrático por el cual se rige la cultura Occidental: ETA, Hezbollá, ELN, FARC, EPP, Hamas, Foro de Sao Paulo. Es el único país del mundo donde los servicios de inmigración, identificación, registros y notarias, puertos y aeropuertos, seguridad del estado, incluyendo sus embajadas, y fuerza armada son tutoreados y controlados abiertamente por extranjeros. Es el único país del mundo donde existen dos autoridades por estado, municipio o alcaldía, el elegido y el oficioso. Es el único país del mundo que ha desmantelado en su totalidad sus empresas básicas, incluyendo la de hidrocarburos. Y es el único país del mundo donde la totalidad del tren ministerial, y alto mando militar están señalados como criminales internacionales. Y, para no derramar otra lágrima, es el único país del mundo donde sus ciudadanos deben colocar sus rodillas en tierra para implorar un “carnet de la patria”, para saber que aún se les permite respirar, mientras arrastra su miseria.
Y si no surge una Fuerza Multilateral de Liberación armada con armas de fuego de poder destructivo inmediato, y armada con medicinas y alimentos y hospitales para rescatar una nación subyugada y en extinción, será igualmente el único pueblo del mundo que decidió desaparecer como nación.