La decisión de la Casa Blanca el lunes de otorgar el Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) a los ciudadanos venezolanos podría beneficiar a unos 320.000 inmigrantes que se encuentran en Estados Unidos debido a la situación especial por la que atraviesa su país.
¿Quién otorga el estatus?
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS), que bajo la consigna de “mantener a Estados Unidos seguro”, se encarga de la seguridad pública del país, decide qué ciudadanos entre los que se encuentran en Estados Unidos de manera irregular podrán acogerse al TPS. Para ello la entidad observa si se cumplen determinadas condiciones en los países de origen de los solicitantes, a saber: conflicto armado vigente, desastre ambiental o epidemia, u otras condiciones extraordinarias y temporales.
El senador Bob Menéndez, demócrata por Nueva Jersey y presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, como impulsor del beneficio para los venezolanos, argumentó: “Seguir deportando a los venezolanos de regreso a la tragedia de Maduro sería decirles que son una carga para nuestras comunidades, una amenaza para nuestra seguridad nacional e invitados no deseados en nuestro país. La realidad y nuestro interés nacional son precisamente los contrarios”.
¿Por qué otorgarlo a los venezolanos?
Aunque Venezuela no está bajo un conflicto armado, la situación política, económica y social en la nación latinoamericana ha llevado al menos a 5,4 millones de venezolanos a huir de su país, según datos de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
“Las condiciones de vida en Venezuela revelan un país en crisis, incapaz de proteger a sus propios ciudadanos”, dijo el lunes el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, al designar a ese país para el importante programa.
El 10 de diciembre de 2020, la ONU y la Organización Mundial para las Migraciones (OIM) lanzaron un plan regional de 1.400 millones de dólares a fin de ayudar a estos refugiados repartidos en todo el mundo y los países que los han recibido, en medio de una crisis agudizada por la pandemia de COVID-19.
En un informe de septiembre de 2020, la Oficina de la Alta Comisionada para los Refugiados de la ONU, bajo la coordinación de Michelle Bachelet, aseguró que “que las autoridades y fuerzas de seguridad venezolanas desde 2014 han planificado y ejecutado graves violaciones de derechos humanos, incluidos los asesinatos arbitrarios y el uso sistemático de la tortura, que constituyen crímenes de lesa humanidad».
¿Cuáles son los beneficios del TPS?
Podrán permanecer en el país, obtener un permiso de trabajo por 18 meses y aplicar para recibir un permiso para viajar. El TPS no les confiere la condición de residentes, sin embargo sus beneficiarios pudieran en un futuro aplicar para obtener otro estatus.
La posición de EE. UU.
El Gobierno de Estados Unidos dijo en un comunicado, citando a Mayorkas, que la decisión “se debe a condiciones extraordinarias y temporales existentes en Venezuela que evitan que los nacionales regresen a su país de manera segura, entre estas, una crisis humanitaria compleja, marcada por la propagación del hambre y la malnutrición, a la creciente presencia de grupos armados no estatales y a una infraestructura que se tambalea”.
El Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS) exhorta a todos aquellos venezolanos que consideren que son elegibles para el TPS, a presentar su solicitud en un plazo de 180 días.
El DHS aclara que únicamente “las personas que pueden demostrar residencia continua en Estados Unidos al 8 de marzo de 2021 son elegibles para el TPS”, e insiste en que la personas actúen con cautela ante anuncios de traficantes u otras personas que afirmen que la frontera ahora está abierta. Las restricciones de viaje y admisión en la frontera, impuestas por la pandemia del COVID-19, siguen vigentes, indicó el departamento.
¿Qué otros países han recibido el estatus?
Además de Venezuela, anteriormente Estados Unidos otorgó esa condición a Haití, El Salvador, Guinea, Honduras, Liberia, Nepal, Nicaragua, Sierra Leona, Siria, Somalia, Sudán, Sudán del Sur y Yemen.