«… el ambiente internacional es francamente desfavorable para las inconstitucionales elecciones del 20-5 y sus fraudulentos resultados»
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En pocas palabras. Javier J. Jaspe
Washington D.C. / Análisis Libre
Las noticias que llegan de Venezuela anuncian el inicio de la campaña de las falsas elecciones convocadas para el próximo 20 de mayo (20-5) por la narcodictadura militar, castrocomunista y promotora del terrorismo, de Nicolás Maduro Moros, con la complicidad de la asamblea nacional constituyente ilegítima y fraudulenta (ANCIF) y el espurio consejo nacional electoral (CNE).
Como era de esperarse, esas mismas noticias también revelan que el clima politico de respuesta de la gente a dicha campaña es el de la más absoluta indiferencia, cuando no de rechazo, por cuanto no desean participar en una farsa electoral cuyo único propósito es el de reelegir a Maduro por un nuevo periodo presidencial que prolongaría por otros seis años su nefasto regimen dictatorial. Este clima de indiferencia se encuentra, además, estimulado por el conjunto de factores que apuntan hacia la necesidad de lograr de manera perentoria un cambio de gobierno que permita poner en practica soluciones a la grave crisis que enfrenta el país, en ambiente de democracia y libertad. A continuación pasamos rápida revista a estos factores.
Rechazo de la comunidad internacional
La comunidad internacional ha mostrado un rechazo generalizado a la farsa electoral del 20-5 y ha indicado que no reconocerá a la persona que resulte ganadora en dichos comicios. Igualmente, varios países han manifestado su disposición a imponer o intensificar sanciones al regimen madurista y/o sus personeros. Así, por ejemplo, EEUU considera incluso la posibilidad de aplicar sanciones económicas que pueden afectar severamente las exportaciones petroleras que recibe dicho país de PDVSA, con lo cual el regimen madurista o el que resulte de las elecciones del 20-5 vería mermada significativamente las bases fundamentales de sus ingresos por este concepto.
Es más, los pronósticos de subida del precio de la cesta petrolera venezolana en los próximos meses, mayores ingresos con los que el regimen madurista aspira a contar para financiar su cada vez más improductivo derroche, no sólo se ven amenazados por las posibles sanciones de EEUU antes referidas, sino por las propias acciones represivas de dicho regimen en contra del personal de compañías estadounidense, como lo sucedido recientemente con Chevron (https://www.lapatilla.com/site/2018/04/25/chevron-evacua-a-ejecutivos-de-venezuela-luego-de-detenciones-de-personal/).
Lo anterior es sin contar que una reciente decisión de una corte de arbitraje ha condenado a Venezuela a pagar más de dos mil millones de dólares a la empresa petrolera ConocoPhillips, deuda que pagarán todos sus ciudadanos, gracias a la pésima administrción del regimen madurista (https://www.analisislibre.org/venezuela-corte-de-arbitraje-internacional-determina-que-pdvsa-le-debe-us2-040-millones-a-conocophillips-por-expropiaciones/).
Por otra parte, en la reciente Cumbre de las Américas celebrada en Lima el sentimiento mayoritario fue el de rechazo a Maduro, a quien nisiquiera se le permitió asistir. Los 14 países del llamado Grupo de Lima, por lo demás, han manifestado expresamente su rechazo a la convocatoria de las elecciones del 20-5
Más recientemente, 6 países (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Perú y Paraguay) se han separado de UNASUR, organización que fue fundada a iniciativa del propio Hugo Chávez en 2008, con lo cual Maduro se confirmó como el sepulturero mayor de la obra de su antecesor y protector (http://www.el-nacional.com/noticias/latinoamerica/seis-paises-abandonaron-unasur-anos-creacion_231803).
Por tanto, el ambiente internacional es francamente desfavorable para las inconstitucionales elecciones del 20-5 y sus fraudulentos resultados, los cuales ya se anuncian con gran inverecundia acompañada de bombos y platillos
Ausencia de apropiadas garantías y condiciones electorales
No solo se anticiparon las elecciones a una fecha que permitió al gobierno orquestar un mecanismo de inhabilitación de partidos politicos (Primero Justicia, por ejemplo), sino que la misma medida se aplicó a posibles candidatos como Henrique Capriles, por ejemplo. Mientras tanto, a algunos líderes de la oposición se les mantiene sometidos a injusta e ilegal prisión (Leopoldo López de Voluntad Popular, por ejemplo), dando paso en su lugar a una formula para presentar una mayoría de candidatos sin credenciales políticas cuyo papel es servir de comparsa para aparentar una contienda electoral que nada tiene de competitiva.
A la referida ignominia se une la repetición del esquema de coercion del regimen madurista sobre los votantes a través de presiones para obtener el voto de los empleados públicos, así como la utilización del carnet de la patria para condicionar la entrega de bolsas de comida (CLAP) a cambio del voto favorable a Maduro. Ha sido tan burda la maniobra electorera de la dictadura madurista, que sus desesperados esfuerzos han resultado infructuosos a la hora de solicitar la presencia de una misión de las Naciones Unidas y de otras organizaciones para observar e ilusorimente legitimar la farsa electoral del 20-5. El último en expresar su negativa ha sido el Parlamento Europeo, el cual, ante la insistencia de Maduro de invitar a algunos de sus miembros, señaló expresamente que la presencia de éstos, si así fuese, sería a título personal y sin comprometer dicho cuerpo legislativo (http://www.el-nacional.com/noticias/europa/parlamento-europeo-desmarco-supuesta-observacion-electoral-pais_232077) .
La misma ausencia de garantías y condiciones electorales apropriadas para el sainete electoral del 20-5 ha llevado a la Conferencia Episcopal Venezolana, máximo organismo de la iglesia católica en el país, a recomendar que dichas elecciones sean pospuestas a fin de que sean celebradas durante el último trimestre del año en curso (http://www.el-nacional.com/noticias/sociedad/iglesia-catolica-pidio-postergar-elecciones-para-ultimo-trimestre-del-ano_232075). Esta recomendación se ajusta a la práctica reiterada y constante en el caso venezolano, en atención a la disposición constitucional que fija la toma de posesión del candidato que resulte elegido Presidente, para los primeros días de enero del año siguiente a la celebración de los comicios electorales pertinentes.
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Falcón, el lider principal de la comparsa madurista
Pese a sus esfuerzos, el caudal de recursos monetarios que parecen haberse puesto a su disposición para financiar su candidatura y el apoyo de algunos conocidos líderes politicos con pasadas credenciales democráticas, la candidatura de Henri Falcón no ha logrado arrancar. Ésto de por sí constituye una demostración de que los potenciales votantes lo siguen viendo no sólo como el candidato chavista a Gobernador del Estado Lara derrotado por el madurismo en las más recientes elecciones regionales, sino también como la cifra en que Maduro enfoca la esperanza de crear una atmósfera de aparente competencia con el ilusorio objetivo de legitimar su reelección para un nuevo periodo presidencial.
Otro motivo nada despreciable para que los venezolanos no se hayan comido el cuento de la candidatura de Falcón como un genuino opositor frente a la de Maduro, lo constituye su afán de centrar su candidatura en la presentación de un programa de contenido económico (dolarización, bono y salario mínimo en dólares para la gente, devolución de empresas expropiadas a empresarios, desmontaje de controles de cambio y precios, recuperación de producción petrolera…).Y no porque las medidas entre paréntesis, presentadas como señuelo par atraer votos de electores incautos, no puedan llegar a considerarse en la solución de la crisis venezolana, sino porque al desestimar factores más de carácter politico o institucional, Falcón pasa por alto que la implementación de su programa va a depender de éstos últimos.
Efectivamente, Falcón de manera deliberada evita pronunciarse sobre factores que están gravitando para el mantenimiento del regimen dictatorial madurista, con lo cual muestra que no está dispuesto a modificar dicho status quo vigente sino a prolongarlo en el tiempo de su eventual ejercicio presidencial, el cual, por lo demás, luce hasta ahora bastante improbable…Entres estos factores gatopardianos, cabe mencionar brevemente los siguientes:
- La presencia de la ANCIF, la cual se ha autoerigido de manera inconstitucional en un suprapoder que se ha atribuido la facultad para legislar, modificar la constitución, destituir y nombrar funcionarios que son de la competencia de la Asamblea Nacional, convocar elecciones, y, en fin, hacer todo cuanto le sea ordenado por Maduro, para subordinar a los demás poderes públicos.
- El control ejercido por Cuba sobre el gobierno, las fuerzas armadas nacionales y servicios o actividades de eminente interés público (seguridad, policía, identificación, justicia, salud, vivienda, petróleo, educación, relaciones internacionales, entre otros), así como su afán para obtener subsidios a pesar de la grave crisis venezolana.
- El cogollito militar que ha servido de apoyo a Maduro en su labor destructiva del país y para ejercer su cruel y sistemática represión en contra de los venezolanos, deteniéndolos, torturándolos, asesinándolos y sometiéndolos a juicios ante los tribunales militares; cogollito que aspira a seguir disfrutando de los privilegios que goza durante la narcodictadura madurista.
- La labor coactiva del Tribunal Supremo de Justicia y la Fiscalía General de la República, organismos ilegítimos por la designación inconstitucional de sus integrantes y titulares, que solo esperan la instrucción de Maduro para dictar sentencias complacientes y/o encarcelar y someter a juicios indefinidos a quienes manifiestan su disidencia frente a la dictadura.
- La actividad inhabilitadora de la Contraloría General de la República, atenta en en el cumplimiento de su papel para emitir decisiones que impiden a calificados dirigentes de la oposición venezolana, ejercer su inalienable derecho de poder optar y ser elegidos al cargo de Presidente de la República y a otras posiciones públicas.
- La complicidad del Consejo Nacional Electoral, tanto con la ANCIF como con Maduro, organismo organizador de la farsa electoral del 20-5 y de todas cuanto le sean ordendas en terminos de oportunidad y conveniencia desde Miraflores.
De manera, pues, que el silencio de Falcón sobre los factores antes indicados y otros que seria prolijo enumerar, además de su propia participación en un evento electoral absolutamente inconstitucional, desde que fue convocado a instancias de un organismo también inconstitucional como la ANCIF, demuestran que, aún en el supuesto negado de que lograse obtener una votación mayoritaria el próximo 20-5, su improbable triunfo sólo conduciría a la pervivencia del regimen de dominación madurista, del cual forman parte dichos factores. En otras palabras, Maduro habría sido derrotado, pero el régimen de éste seguiría vigente e impediría implementar el programa de medidas que Falcón dice querer adoptar, para solucionar la gravísima crisis que enfrenta el país gracias al mal gobierno del primero.
A manera de comentario final
No puedo finalizar este artículo sin hacer una corta referencia a los días que separan el momento en que escribo y la farsa electoral del 20-5. Lo dicho anteriormente afinca de manera firme el carácter acertado de la decisión adoptada por la mayoría de la oposición democrática, para no participar en dicha farsa. Sinembargo, pareciera justo también recomendar una conducta más proactiva del frente amplio para una Venezuela libre, en la organización y ejecución de eventos para orientar al pueblo venezolano sobre las razones que aconsejan no servir de cómplice de la dictadura madurista participando en los comicios fraudulentos e inconstitucionales del 20-5. Ésto lo digo, porque las acciones de los dirigentes de la oposición, hasta ahora se han dirigido especialmente y de manera pendular a motivar a la comunidad internacional en el rechazo a dichos comicios, descuidando el frente interno.
Una segunda linea de pensamiento, como ya ha sido comentado por destacados analistas del quehacer politico venezolano, obliga al liderazgo opositor a reflexionar sobre qué hacer el 20-5 y, particularmente, a partir del día siguiente en que se revelen los resultados de la farsa electoral. En este sentido, la elaboración de escenarios según se estime el triunfo de Maduro o el hasta ahora improbable de Falcón, deberían servir como marco para perfilar las acciones. Un tercer escenario, donde se prevea la posibilidad de un regimen de colaboración entre Maduro y Falcón, también podría dar orientación sobre acciones a tomar, para el caso de que ello suceda.
En pocas palabras, poner el acento opositor en acciones dentro del país, sin descuidar las relaciones con la comunidad internacional, así como conformar los escenarios que permitan orientar las adecuadas respuestas que deben darse con vista a las difíciles circunstancias por las que se verá obligado a transitar el país en los días por venir, con motivo del 20-5, fecha de las elecciones que no serán…Veremos…